Las tapas y su recorrido visual

Diseñar una publicación periódica es, además de un acto editorial, un acto de mercado, «Establece la identidad, el carácter y la frescura que puede tener un periódico, según su título, su presentación y su contenido. Induce al público a comprarlo, abrirlo y leerlo» (EVANS, H.: Diseño y compaginación de la prensa diaria, Gustavo Gili, Barcelona, 1985.)

Los periódicos sufren un proceso de comercialización, esto es, cómo lograr que el diario llegue más fácilmente al público y a qué público en particular.

Esto se puede identificar en las tapas. Allí se concentra la »capacidad provocativa», lo que atraerá al lector, se muestran los mejores artículos que luego se desarrollan en el interior, es una síntesis de la totalidad del diario.

Un punto muy importante de la portada es el recorrido visual, que se desarrolla a partir de la región óptima primaria (ángulo superior izquierdo), desde ahí la vista sigue una de las dos trayectorias siguientes: Lectura circular, en el sentido de las agujas del reloj; Lectura en Z, se divide la página en dos mitades horizontales (superior e inferior) y dos mitades verticales (izquierda y derecha). Se considera que la parte superior tiene mayor valor que la inferior y que la izquierda tiene más valor que la derecha. Así la página divide la plana en cuadrantes, de los cuales el más importante será el superior izquierdo y el menos, el inferior derecho. En consecuencia, según esta teoría la vista hace una lectura siguiendo el trazado de la letra zeta (Z).

Aunque tradicionalmente se creía que el primer lugar donde se fijaba la vista era el ángulo superior derecho, ambas lecturas explicadas son teorías que conviven actualmente, donde se señala la zona de apertura de visión al ángulo superior izquierdo.

Fuente: González Briones, Elena; Bernabeu Morón, Natalia. El periódico. España, 2008.

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