¿Qué esconden los libros?
Pensando y buscando información para realizar este post sobre todas las cosas técnicas que un libro posee, y así poder desarrollar alguna, me acordé de la primera clase de apertura de este tp en el taller, cuando nos preguntaron ¿qué es un libro? ¿cómo se relacionan con él? ¿lo tienen guardado como algo muy valioso o lo prestan?, y me puse a pensar que sería bueno dejar de lado un poco lo técnico y reflexionar acerca de que nos pasa cuando tenemos un libro en la mano, que es lo que los hace tan importantes y que nos lleva a valorarlos tanto.
Desde chicos nos repiten que leer es bueno, que es importante para nuestro conocimiento, pero ¿qué es lo que ocurre con la lectura de un libro y su poder para desarrollar habilidades que no se adquieren contemplando videos, fotos, o escuchando música?. Leer amplía la conciencia, aunque actualmente no sea lo más importante para la gente porque los demás formatos de comunicación dan prioridad al espectáculo y los chismes, y la gente lo privilegia, leer amplia el vocubulario, incrementa la imaginación, mejora la ortografía y ejercita la mente. La lectura ofrece numerosas posibilidades de conocer otros mundos, de entenderlos hasta en sus más insignificantes detalles. Una sociedad que lee, propondría soluciones para un entorno mucho más comunitario, pudiendo mejorar la conversación, el discurso de lo que es social, de lo que es político, de lo que es justo, puede verse mejorado. Existe un proceso cognitivo y psicológico en el acto de la lectura que implica una particular decodificación, tanto a niveles sensoriales como del pensamiento, generando y disparando otros dispositivos de la imaginación,
inventándola. Hay un proceso de creación de la imagen: ésta se crea, pero no se ve. Y acá radica para mí lo que verdaderamente esconden los libros, todos hemos vivido aventuras en ellos, volado muy lejos, matado monstruos, salvado almas que necesitaban ayuda y viajado a través de increíbles paisajes y lugares nuevos. Por eso creo que esa es la magia a la que nos tienen acostumbrados, a la que ocultan dentro de un conjunto de páginas entre dos tapas. Pensamos en magia como algo que se hace con varitas, varas y bastones, pero en realidad son lápices,
bolígrafos, plumas o teclas. La tinta es la capaz de derrotar a imperios y crear vida. Comenzamos por el primer capítulo, nos cautiva y comenzamos el viaje que continúa por ciento de hojas. Y es todavía mejor esos libros que parecen conocernos, que nos confirman lo que sentimos y de alguna manera nos ayudan y nos comprenden; como si libro y lector fueran uno solo.
Entonces y ya concluyendo este post, me preguntaba ¿qué sería de nosotros sin libros, sin historias que contar? Creo que todos necesitamos una buena historia en nuestras vidas. Aunque sólo fuera una. Los libros son la magia de nuestro tiempo. Los libros y su mágica manera de preservar nuestras historias favoritas son lo que los hacen verdaderamente valiosos y nos llevan a guardarlos en nuestra biblioteca o en un cajón y no querer prestarlos por el miedo a que lo estropeen, o lo que es peor aún que se pierda. Ese olor a páginas impresas, se está perdiendo
con la tecnologías, de la que por supuesto todos hacemos uso, pero por alguna razón más de las ya mencionadas esto jamás morirá por completo. Por muchos libros que se puedan almacenar en las tablets, ebooks y pc, la mayoría de las personas prefiere comprarse un libro con páginas que pasar y poder tener ese objeto material y no un archivo de pc. Escribiendo esto me hizo acordar que también se relaciona con el tp anterior en la manera en que nos vinculamos con la música, si bien todos escuchamos por youtube o descargada de algún sitio; igualmente nos
tomamos la molestia de ir a comprar el cd original de nuestra banda preferida y atesorarlo como un objeto único.
Dando fin a este post y no yendome por las ramas con otro tema, espero que les haya sido de aliento para seguir leyendo, descifrando cada palabra, cada frase, y descubriendo los misterios que ocultan.
Etiquetas: imaginación, libro, textos, valor