RADIOGRAFÍA DE UN VINILO
Autor/a: Carolina Chane
Hoy en día, seguimos prefiriendo el vinilo a pesar de las nuevas innovaciones tecnológicas del sonido. ¿A que se debe? ¿Cuales son sus ventajas y desventajas?
Es de creencia popular que el vinilo tiene un sonido mejor que los formatos digitales de la actualidad. ¿Es eso cierto?
Para comenzar vamos a introducir al vinilo como objeto. Como todo objeto, esta compuesto por distintas partes. Primero se encuentra el disco que esta compuesto por distintas partes. Primero se encuentra el disco que consta de dos caras. El sonido se logra por vibraciones que produce el rozamiento de la aguja del reproductor con el material plástico. Hay distintos formatos de disco: el estándar de 12 pulgadas y el de 7 pulgadas, generalmente utilizado para Singles. El disco contiene surcos que es donde reside el archivo sonoro y el agujero que puede ser grande o pequeño. También podemos encontrar la galleta, que es el nombre que recibe el espacio entre el último surco grabado y el agujero central. Este disco viene dentro de una funda, que lo protege de ralladuras, y esa funda viene dentro de la carpeta que nosotros los diseñadores nos encargamos de diseñar. Esta carpeta contiene un lomo, donde se encuentran los principales datos para poder identificarlos rápidamente.
Estos discos puede ser grabados a distintas velocidades, como por ejemplo 33 rpm y 45 rpm. Existen distintos tipos de discos, el LP que es el formato del álbum clásico, el EP que se acostumbra a usar para álbumes de colección, el Single y el Maxi-Single (que contiene una carpeta más grande pero que sigue conteniendo una canción por cara)
¿Por que es considerado mejor que los formatos digitales? Primero y principal, el vinilo es un formato completamente analógico y sin pérdidas. Es una experiencia fidedigna por que el artista puede transportar su música sin las complicaciones de la conversión digital, que produce una pérdida en la pureza y ciertas partes de la canción. Es como si uno quisiera meter todo el contenido de su placard en la valija. Inevitablemente algunas prendas quedarían afuera. En el vinilo esto no sucede, ya que contiene el espacio suficiente. Es un proceso social ir a comprar un vinilo, y con lo digital en el cual una persona descarga una canción desde su computadora, eso se pierde.
También, como todo, tiene sus desventajas. Las frecuencias agudas no son muy compatibles con los vinilos, presentan una variación en el sonido al principio y al final, son artefactos muy sensibles debido a que cualquier partícula de polvo puede dañarlo y ser escuchado como sonido o estática y también se degradan con el tiempo, cosa que con los formatos digitales no sucede.
En mi opinión, a pesar de sus múltiples ventajas y desventajas, a pesar de las nuevas tecnologías y mejoras en el sonido, el público sigue y seguirá eligiendo los vinilos. La experiencia de escucharlo incluye mucho más que el sonido en si mismo, incluye el acto de sacarlo del sobre, ubicar la aguja sobre el disco y los diseños de las tapas. Es algo mucho más personal. Pueden pasar años, décadas, pero el ser humano nunca dejará de preferir un objeto tangible ante la mejor tecnología. Igual que con los libros, pueden existir libros electrónicos, con muchas ventajas, pero la experiencia de tener el libro en la mano, es irremplazable.
Como Charlie Garcia en el 2013 dijo: » Llegó un momento en el que todos los discos sonaban iguales y era un plomo ir con el CD y escucharlo en tu casa y que sonara como una milanesa napolitana. Le están sacando la pasión a la música. El principio es muy simple, cuando tocas una nota, transmitís una vibración, y eso llega en estado puro a un vinilo»
Alfredo Rosso también dedicó unas bonitas palabras a este objeto: «El vinilo era orgánico. El cuarto se llenaba del sonido envolvente de los bajos, el ataque de las guitarras. La música se hizo para la gente y los vinilos como los humanos, también reflejaban el paso del tiempo.»
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