Carolina WasletMe parece significativo hacer referencia a la revista de chicos con más trayectoria en el país, que sin interrupciones esta a la venta desde hace más de 90 años; Al semanal que en un principio surgió como “educativo y divertido” para luego tornarse en material imprescindible en las escuelas, con sus clásicas figuritas de próceres.
La revista Billiken se publicó por primera vez el 17 de noviembre de 1919 y se sigue editando hasta hoy. Cabe destacar que además, adaptándose a las nuevas tecnologías, cuenta con un sitio web (billiken.com.ar). Icono cultural de la clase media y nunca opacada por ningún rival, su colección completa se ha convertido casi en material “incunable” que se guarda en alguna privilegiada biblioteca nacional.
En sus 97 años de vida, la célebre revista fundada por Constancio Vigil pasó por diversas etapas que fueron forjando tanto la relación entre los medios de comunicación y la escuela como el imaginario político y social de buena parte de la clase media -y media alta- de la Argentina. Heredada de padres a hijos, a lo largo de generaciones, Billiken generó un sistema gráfico de tapas que reflejan esta enorme capacidad de adaptación a los avatares políticos y sociales del país. En sus más de 5.000 ediciones, las tapas “dieron la cara” en cada kiosco de la Argentina, de Uruguay y de otros países de Sudamérica, reflejando al mismo tiempo, el contenido de cada número y a su vez los aspectos relevantes de una época determinada.
Creo que, con solo ver algunas de las tapas de esta prestigiosa publicación, se puede apreciar como plasma a la sociedad a lo largo de los años. Se pueden observar rápidamente los cambios en los elementos gráficos, en la moda, en el pensamiento y en los discursos, entre muchos más.
Si bien existen variadas discusiones y debates sobre si algunas tapas dejan la ternura y la niñez de lado para ser racistas y/o sensuales, mi intención con este post no es indagar acerca del pensamiento o postura de la editorial de la revista o los dibujantes, sino demostrar como un simple sistema (como el que nosotros tenemos que crear para el trabajo práctico) puede evidenciar los cambios de un país (claro esta que esta no va a ser una evidencia objetiva, pero va a serlo en fin).
Comparto las imágenes de algunas de las tantas tapas de Billiken:
