Creada por el escritor Washington Cucurto y el artista plástico Javier Barilaro, la editorial surge en el contexto de la crisis del 2001 y 2002. El objetivo del proyecto es el de generar trabajo genuino a través de la difusión de obras latinoamericanas de diferentes géneros: el cartón se compra a recolectores informales a un precio mayor que el que se paga usualmente y también se paga a quienes pintan las tapas de los libros. En cuanto a las obras, los escritores ceden los derechos de autor para la publicación.
Los ejemplares se realizan enteramente en la cooperativa: se corta el cartón, se pinta y se decora, se encuaderna junto con las hojas impresas también allí. Actualmente hay diez personas trabajando en la cooperativa.
Los diseños de tapa de Eloísa Cartonera son composiciones tipográficas coloridas y gestuales. Se utiliza un diseño base que se transfiere mediante la técnica de stencil y que luego es intervenido. En algunos casos, el trabajo realizado se combina con la gráfica impresa en el cartón.
Eloísa Cartonera fue la primera editorial cartonera del mundo. Hoy en día, su experiencia puede verse replicada en varios países de América, África y Europa. Actualmente, Eloísa vende sus ejemplares a librerías de todo el país y participa de eventos masivos tales como La Feria del Libro y ArteBa.