¿Alguna vez pensaste que por descargar inocentemente una fuente tipográfica tendrías que pagar una multa por derechos de autor?
Muchos diseñadores desconocen el tema, esto es grave, ya que es un aspecto delicado que tiene una estrecha relación con las leyes de derechos de autor y son sancionables por la ley.
Un mal uso y/o el uso inocente, sin tener una licencia que te permita utilizar la fuente para fines comerciales podría meterte a ti o a tu cliente en problemas legales por violar los derechos de autor al usar un contenido sin el consentimiento, convenio, licencia o por no dar reconocimiento al autor sobre su propia obra.
¿En qué se diferencian las licencias tipográficas?
Para empezar, existen las licencias permisivas (SIL/GPL/MIT/BSD/APACHE) y las licencias privativas (EULA).
Principalmente, las permisivas, por elección de sus autores, pueden ser descargado gratuitamente, copiado, estudiado, modificado, utilizado libremente con cualquier fin y redistribuido con o sin cambios o mejoras.
En cambio, las privativas, sólo se encuentra a disposición de su desarrollador y no se permite su libre modificación, adaptación o incluso lectura por parte de terceros, se puede usar pagando la Licencia de Uso.
“Un mal uso y/o el uso inocente, sin tener una licencia que te permita utilizar la fuente para fines comerciales podría meterte a ti o a tu cliente en problemas legales “
Por eso siempre al descargar una fuente de manera online hay que verificar
que venga con su licencia correspondiente.