Rocío Giraldez
Hace pocos días, realizando la investigación para el presente trabajo, descubrí el trabajo Eric Benson (un profesor de la Universidad de Illinois) acerca de las prácticas del diseño asociadas a la sustentabilidad. Esta temática me generó particular interés ya que poco había oído hablar de la misma y a su vez, derribo varios de mis prejuicios sobre la sustentabilidad y la identidad visual.
Eric Benson propone propone algunos ejes para tener en cuenta a la hora de combinar ambos conceptos y no caer solamente en la utilización de «verde» como demostración de la sustentabilidad o la ecología en el diseño. En primer lugar, se distinguen ciertos principios de la sustentabilidad: respetar y cuidar a la comunidad, mejorar la calidad de vida, conservar la vitalidad de la Tierra, minimizar el agotamiento de los recursos no renovables y cambiar las actitudes y las costumbres personales para ajustarse a la capacidad del planeta.
En base a los principios, deberíamos plantearnos las siguientes preguntas (las cuales por obvias muchas veces pasamos por alto): ¿Es éste el mejor método para comunicar el mensaje? ¿Es necesario que sea tangible? ¿Es posible generar un sistema de identidad visual puramente digital y de gran alcance de audición? En el caso de que sea tangible, ¿Qué repercusión tiene la creación de este soporte? ¿Es posible reducir los desechos del proceso? ¿Cómo podemos reducir el impacto durante el proceso de impresión?
Estos principios y preguntas alientan al diseñador a tomar decisiones en el ejercicio de su profesión como, por ejemplo: diseñar para la re-utilización, elegir materiales reciclados no tóxicos, reducir al mínimo el material de desecho y el empleo de tinta ( un breve artículo sobre los materiales y procesos sustentables http://www.designorate.com/sustainable-graphic-design/); elegir proveedores que empleen energía renovable y prácticas comerciales justas y respetuosas del medio ambiente, educar a los consumidores acerca del ciclo de vida a través del mensaje y el marketing, animar a otros a diseñar de una manera sostenible y generar conciencia en todos los ambientes de interacción tanto profesional como socialmente.
Es importante que los diseñadores como productores y consumidores ayudemos a cambiar la forma en la que está funcionando nuestra profesión y nuestro entorno social para mejorar la calidad de vida.
Un ejemplo de este movimiento sustentable es el estudio DESIGN ACTION COLECTIVE ( designaction.org/ ) de la ciudad de Oakland, California, Estados Unidos; cuyo objetivo es generar diseño gráfico y comunicación visual para organizaciones progresistas, sin fines de lucro, que buscan generar cambios sociales. Este estudio se cuestiona el papel del cliente en el proceso del diseño de una identidad visual y que rol «educador» que debemos adoptar los diseñadores para, además de generar nuestro diseños en materiales sustentables, incluir a los clientes en las buenas prácticas sustentables.
Por último, esta investigación me planteó algunas dudas: ¿será sustentable la realización de sistemas de identidad visual solamente mediante plataformas digitales? ¿eso realmente reduciría el impacto ambiental o generaría más chatarra electrónica a nivel mundial? ¿Los carteles de Led y las distintas pantallas podrán generar el mismo impacto que un afiche o causarán más daño ambiental? ¿Podrá el diseño digital realizar un cambio tan importante como el que significo la imprenta de Gutenberg por sobre los manuscritos? ¿Son realmente las bolsas ecológicas, los materiales reciclados o las tintas no toxicas las formas de generar sistemas visuales sutentables?